A diferencia de la mayoría de comidas o bebidas, el alcohol no necesita ser digerido, lo cual significa:
Como no tiene que ser digerido, el alcohol ingresa rápidamente en el torrente sanguíneo de una persona y llega al cerebro en minutos. Se elimina del cuerpo de forma relativamente lenta, a una velocidad de alrededor de una bebida por hora en promedio.
- Que dentro de algunos minutos después de haber sido consumido, este alcanza el cerebro y empieza a afectar al bebedor
- Que nunca se elimina del cuerpo
- Toma un tiempo largo para sentir los efectos del alcohol
- Una vez que el alcohol está en tu sistema, tu cuerpo se deshace de éste rápidamente